Universidad de Talca digitalizará legado musical de Claudio Arrau

Proyecto rescatará las partituras utilizadas por el notable pianista chileno, con el fin de convertirlas en recurso educativo digital disponible para todo público en la web.

Preservar las partituras utilizadas por el célebre pianista chileno Claudio Arrau, digitalizarlos y ofrecer su descarga gratuita a través de internet, es el propósito del convenio de trabajo suscrito entre el Museo que administra el legado del músico en Chillán y el Centro de Documentación Patrimonial (CENP) de la Universidad de Talca.

Considerado como uno de los más destacados pianistas del siglo XX a nivel mundial, Arrau también hizo historia como un artista pionero por grabar el primer disco compacto de la historia, editado por el sello Orfeo, que incluyó el recital ofrecido por el pianista en el Festival de Salzburgo, Austria, el 15 de agosto de 1982, donde interpretó dos sonatas de Franz Liszt y la “Appassionata” de Ludwig van Beethoven.

Las partituras del eximio maestro –que incluyen anotaciones de su puño y letra- llegaron a Chile hace 20 años como parte del legado que donaron a Chillán los hijos del pianista, Christopher y Carmen Arrau.

Son seis mil textos musicales que empleó durante su carrera para estudiar e interpretar a 700 compositores en los principales escenarios del mundo, documentos que ayudarán a reconstruir su historia y a revelar la tradición interpretativa que heredó de su maestro alemán, Martin Krause, que proviene directamente de Beethoven, pasando por el austriaco Carl Czerny y el austro-húngaro Franz Liszt.

El director del Instituto de Estudios Humanísticos ‘Juan Ignacio Molina’ de la UTALCA, Pedro Zamorano, destacó la importancia del proyecto. “La iniciativa es sin duda un gran aporte a la cultura, debido a la importancia de Arrau para la música universal”, sostuvo el docente. “Para esto ofrecemos nuestros recursos técnicos, equipos, archivos e investigación académica”, indicó.

En tanto, la investigación del legado musical de Arrau está a cargo del investigador de la UTALCA, José Miguel Ramos.

“El corpus es de un valor inconmensurable por partida doble. En una dimensión patrimonial e histórica, al ser reflejo de un trabajo de verdadera artesanía musical en función de una interpretación profunda y honesta que caracterizó su trabajo en el mundo entero, y en una dimensión práctica para pianistas, directores e intérpretes en general, ya que las numerosas indicaciones autógrafas presentes (de tempo, dinámicas, cesuras, fraseos y digitación) dan cuenta de la verdadera labor investigativa llevada a cabo por el maestro (Arrau) al enfrentar una obra musical”, explicó.

ALTA RESOLUCIÓN

Las partituras pertenecientes al Museo Arrau están siendo trasladadas al laboratorio de Conservación de la UTALCA para ser restauradas y digitalizadas a través del escáner de alta resolución que posee el Centro -único en universidades de regiones-, material que luego será “puesto en línea”.

“Deben estar disponibles para las futuras generaciones”, señaló el director del museo, Gabriel Eduardo Peña. “Por eso firmamos un convenio con la Universidad de Talca para conservar y digitalizar dos mil partituras, en un primer momento”, dijo.

En ese sentido, el encargado del CENP, Eduardo Bravo, explicó que la idea “es que estas partituras y sus valiosas anotaciones se conviertan en un recurso educativo que pueda ser descargado desde nuestra plataforma, para ser utilizado en clases de música en los colegios”.

La restauradora del CENP Katina Vivanco, recordó que en enero de 2015 el Centro realizó un diagnóstico general de las partituras que arrojó un estado “regular, no crítico, pero algunas obras en mal estado”. En base a ello se elaboró un informe detallado de las características de la colección y las propuestas de tratamiento.

Las anotaciones de puño y letra de Arrau ayudarán a reconstruir la importancia de este pianista y sus valores inspirados en la paciencia, la concentración y la humildad. Revelarán al mismo tiempo la tradición interpretativa que heredó de su maestro alemán, Martin Krause, y que proviene directamente de Beethoven, pasando por el austriaco Carl Czerny y el austro-húngaro Franz Liszt.

“Estimamos que a fin de 2015 tendremos mil partituras conservadas y digitalizadas. Partiremos con Liszt, que marcó una etapa decisiva en la vida del maestro Arrau”, precisó Bravo.

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