UA apoyó a Fundación Coanil con actividad de fin de año

A través de la Campaña “El Árbol de los Sueños”, la casa de estudios superiores regaló un momento de alegría a los menores que atiende la institución y a sus familias, gracias a la participación de funcionarios y estudiantes.

“El Árbol de los Sueños” se llama la campaña a la que cada año es convocada la comunidad de la Universidad Autónoma de Chile en Talca para celebrar la Navidad compartiendo con niños que muchas veces no tienen oportunidades de recibir un regalo o un momento de alegría.

Este año, la institución de educación superior – a través del voluntariado-  logró que funcionarios y estudiantes apadrinaran a cada uno de los 35 niños que atiende en Talca la Corporación de Ayuda al Niño Limitado, Coanil, con su Programa Ambulatorio de Discapacidad “Los Cipreses”.

Fue un trabajo que se realizó durante todo el año apoyando a esta institución, labor que se vio coronada con la actividad de fin de año en que los niños y sus familias compartieron una tarde llena de colorido, música y alegría.

“Esta campaña todos los años resulta un éxito, gracias al aporte que hacen funcionarios y docentes de la universidad, quienes se comprometen con el regalo de un niño. Esto responde a la política de Responsabilidad Social Universitaria que tiene la Universidad Autónoma de Chile, la que nos permite trabajar con instituciones y agrupaciones realizando un aporte concreto en el mejoramiento de sus condiciones”, puntualizó la Directora de Asuntos Estudiantiles de la institución educacional, Katherine Valenzuela.

Por su parte, para la Fundación Coanil, que atiende a menores muchas veces en situaciones muy críticas de salud y vulneración de derechos, este lazo con la Universidad Autónoma de Chile es ampliamente valorado “Esto es muy importante porque le damos un sentido, una alegría, un momento, además, de compartir con otros niños que participan de nuestros programas. No todos tienen la posibilidad de pasar una Navidad como todos nosotros, muchas veces escasean los recursos, por lo tanto, son más sencillas sus Navidades. Entonces esta posibilidad de compartir, de estar con el Viejito Pascuero, de recibir un regalo, para ellos es muy importante y desarrolla mucho su autoestima también”, destacó la representante de la Fundación Coanil, Catalina González.

De esta manera, los niños recorrieron la universidad, jugaron, se divirtieron, compartieron dulces y con la visita de Santa coronaron una jornada llena de alegría y emoción, tal como lo fue para Mía Bravo, una niña talquina que contenta jugó con el peluche que alguno de los funcionarios de la universidad compró con cariño para ella.

Para los niños y sus familiares fue una jornada mágica y también para los funcionarios de la universidad que regalaron más que algo material a estos menores en una fecha tan relevante y especial.

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