En nuestra región el número de ópticas ha aumentado ostensiblemente. En el Maule existen 75 de estos locales distribuidos en las cuatro cabeceras provinciales y tan sólo en Talca hay 23. En este contexto y como una forma de comprobar en terreno el cumplimiento de la reglamentación por parte de estos establecimientos (Decreto Nº 4 y Nº 594), el Seremi de Salud, Hans Lungenstrass junto a un equipo de profesionales, realizó durante todo el día una intensa fiscalización de las condiciones sanitarias y ambientales básicas en estos lugares, para evitar riesgos a la salud de las personas.
Labor que en su primera etapa, dejó a dos locales con prohibición de funcionamiento; el primero de ellos, óptica “Kornich” – ubicada en 6 Oriente entre 1 y 2 Sur – fue sancionada por no contar con casa matriz autorizada para la compra de lentes ópticos. Además, de presentar una situación estructural severa, al no tener certificado de habitabilidad tras el terremoto del 27/F. Cabe recordar, que dicha óptica ya tenía un sumario previo cursado por la Autoridad Sanitaria.
Por su parte, la óptica “Roland” – ubicada en calle 2 Sur entre 1 Oriente y 1 Poniente – fue el segundo establecimiento de este tipo que resultó con prohibición de funcionamiento.
“Detectamos el incumplimiento de la normativa en este local, al no contar con taller para la confección de lentes ópticos, además, de la falta de condiciones sanitarias para los trabajadores de la tienda, así como, la carencia de normas de seguridad mínimas, entre otras deficiencias”, aseguró la Encargada de la Unidad de Prestadores de la Seremi de Salud, Francia Campos.
Además, durante el recorrido de la mañana, la óptica “Cordillera” fue sumariada por no contar con un taller adecuado para la confección de lentes, por tener el extintor vencido, problemas de evacuación y por no contar con registro de recetas.
Uno de los requerimientos legales más importantes que exige el reglamento de ópticas es que estos locales deben funcionar bajo la dirección técnica de un óptico el que debe estar certificado por la Autoridad Sanitaria.
“La población debe estar atenta al comprar un lente que no tiene la autorización, por un lado está el daño económico al adquirir un lente óptico que no va a funcionar y por otro lado, está el consiguiente dolor y problemas a la visión que acarrean estos productos defectuosos , en este sentido la comunidad debe ser más severa y exigir en el caso de los lentes de contacto, un contactólogo autorizado y de esta forma evitar enfermedades e incluso perder la visión ” insistió el Seremi de Salud, Hans Lungenstrass.
Finalmente, en el transcurso de la tarde se continuó las fiscalizaciones a estos establecimientos, lo que arrojó cuatro ópticas sumariadas, las que en su mayoría comercializaban los lentes ópticos sin tener autorización para ello. Los sancionados quedaron citados a Unidad de Jurídica de la Seremi de Salud para presentar sus correspondientes descargos.