SAG realiza rigurosos procedimientos de fiscalización a bodegas de vino en el Maule

Ante el incumplimiento de la normativa que rige las pautas sobre producción, elaboración y comercialización de alcoholes etílicos, bebidas alcohólicas y vinagres -establecidas en la Ley 18.455- por parte de algunas bodegas de vino en la región del Maule, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) está realizando rigurosos procedimientos de fiscalización con el fin de dar cumplimiento a la normativa y proteger a los consumidores.

El trabajo se ha desarrollado en diferentes bodegas a lo largo de la región, en las que se verificó la existencia de vinos y documentación de respaldo de ingreso y salida de uvas de las bodegas productores y/o elaboradoras, las declaraciones de cosecha y actualización del catastro vitícola y el uso de productos autorizados por Ley, entre otros.

Hasta el momento, se ha tenido que proceder al cierre temporal (10 días) de una bodega de vinos ubicada en el sector de Melozal; medida adoptada luego de una importante y reiterada acumulación de infracciones a la normativa de producción por parte de ésta, lo que pone en riesgo la salud de los consumidores.

Cabe mencionar que durante el mes de abril pasado, la primera etapa de inspección arrojó como resultado un total de 107 fiscalizaciones, siendo la zona de Linares quien encabeza la lista de análisis con 51 bodegas examinadas, lo que significa que se barrió con más de un tercio de las bodegas existentes en la región (282 en total).

Ley de alcoholes

El trabajo que realiza el SAG apunta a que toda persona natural o jurídica que produzca, envase, comercialice, importe o exporte alcoholes etílicos y bebidas alcohólicas debe como primer trámite informar al Servicio sobre su inicio de actividades. Con este trámite, la persona pasa a formar parte del Registro de Productores, Envasadores, Comercializadores, Importadores y Exportadores de Alcoholes Etílicos y Bebidas Alcohólicas.

El objetivo del SAG es mantener un registro de productores, elaboradores, envasadores, importadores, exportadores y comerciantes de vinos, piscos, licores, cervezas, vinagres y otras bebidas alcohólicas. De esta manera, es posible controlar que la producción y comercio de estos productos se ajusten a los requisitos exigidos a cada uno de ellos.

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