¿Por qué mi pelo cambia de textura y/o color?

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Si notas que tu cabello ya no es el mismo desde hace tiempo, tranquila, no es cosa de tu imaginación. Hay una gran variedad de factores que pueden hacer que cambie de color o textura con el paso de los años. Y estos son algunos de los motivos más comunes:

1. Estrés. Un mal momento personal, la presión en el trabajo, problemas económicos… Hay muchas situaciones que nos generan estrés. Y la pérdida de pelo puede ser una consecuencia meses después de ese evento tan estresante, por ejemplo. La buena noticia es que no es permanente, y que el cabello volverá a crecer después de unos meses.

2. Abusar del calor. Tu secador, la plancha o el rizador son los principales culpables de un pelo roto, sin vida y encrespado. No tanto por los aparatos, sino por el calor que desprenden, el cual es demasiado caliente y provocan la rotura del pelo. Además, ese calor puede estropear el color. Así que escoge herramientas con tecnología iónica o de cerámica, asegúrate de bajar la temperatura y utilízalos con el cabello seco.

3. Tratamientos químicos. Decolorar el cabello lo debilitará y le dará una textura más seca. Otros tratamientos como el alisado de keratina o el brasileño (que supuestamente hidratan el cabello) pueden acabar provocando el efecto contrario y cambiar la textura de tu cabello.

4. La genética y el envejecimiento. ¿Ya has visto tu primera cana? No es tu culpa, es una cuestión genética. El pelo canoso se debe a una acumulación de peróxido de hidrógeno en el eje del pelo y que destruye pigmento. La edad en la que esto ocurre depende de la genética de cada persona. Además, tu ADN es el que decide cómo será la textura y el color de tu cabello y cómo de bien (o de mal) envejecerá tu cabellera. Además, ten en cuenta que el color y el brillo del pelo cambia un poco cada década y que el diámetro de tu cabello también crecerá más pequeño.

5. Consecuencias médicas. El pelo que de repente es más fino puede ser un síntoma externo de que algo va mal dentro del cuerpo. La anemia (niveles bajos de hierro en sangre), los insuficientes niveles de vitamina D o sufrir de tiroides pueden provocar la caída del cabello. Además, si tu dieta no contiene los nutrientes suficientes, puedes notar un cabello más fino, y los pacientes que están siendo sometidos a dietas a largo plazo o las que ingieren más de uno o dos zumos al día para depurar pueden ser más propensas a experimentar la caída del pelo por no ingerir las proteínas suficientes.

6. Embarazo. En ese periodo, el pelo suele lucir más grueso, más brillante, y cambia la textura (incluso hay veces que el pelo más rizado parece se estira por arte de magia). Esto se debe a los niveles más elevados de estrógeno, que prolongan la fase de crecimiento del pelo. Después de la gestación, muchas mujeres recuperan el peso y notan como se les cae el pelo. Afortunadamente, las cosas vuelven a la normalidad con el nuevo ciclo. Tan sólo es cuestión de tiempo y de paciencia. Pero aunque es muy común, no todas las mujeres experimentan este fenómeno durante el embarazo.

En definitiva hay muchos factores que pueden cambiar la textura y el color de tu cabello a lo largo de tu vida. Así que no te tires de los pelos si notas que ya nada es lo mismo.

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