Maulinos desencantados por hechos de corrupción según encuesta UTALCA

​Estudio, realizado por el CEOC de la casa de estudios, da cuenta de la decepción que existe entre los habitantes de la región, a raíz de casos como Soquimich – Penta, Caval, la colusión del papel higiénico y el “milicogate”.

Chile se transformó en el país del desencanto y la decepción y en el que la desconfianza ha ganado terreno entre sus habitantes que han puesto en tela de juicio a políticos, empresas, instituciones diversas y el sistema. Todo por los sucesivos hechos de corrupción que estallaron durante 2015 y cuyos efectos se siguen sintiendo.

Pero no es que lo que está sucediendo no haya ocurrido antes. Lo que pasa es que hoy todo se sabe porque “lo que no aparece en la TV, radio o prensa escrita, ahora se difunde a través de a redes sociales”.

El análisis sobre esta realidad corresponde a un estudio realizado por el Centro de Opinión Ciudadana (CEOC) de la Universidad de Talca, dirigido por Medardo Aguirre, sobre la base de una encuesta aplicada en diciembre a 433 personas que viven en las capitales provinciales de la Región del Maule.

Según ese estudio, la desconfianza de las personas se produce cuando se sienten engañadas o cuando estiman que no se están cumpliendo con los acuerdos y compromisos. Eso ocurrió en 2015 con los hechos de corrupción que involucraron tanto al gobierno como a la oposición, entre los que están los casos Soquimich, Penta, Caval y otros de cohecho de algunos políticos. “También grandes empresas implicadas en colusión como la Papelera, fraudes con platas del cobre, a través del “milicogate”, graves denuncias contra miembros de la iglesia católica y el escándalo de la FIFA que involucró hasta al presidente del fútbol chileno, Sergio Jadue”, señala el informe.

Luego se generó la situación que afecta al entrenador de la selección chilena, Jorge Sampaoli, hechos que se considera “detonantes para la generación del ambiente de desconfianza y decepción en las instituciones del país”.

Fin de un mito

Una característica común es que en todos ellos aparecen nombres de personalidades, políticos y empresarios “que supuestamente deberían cumplir con preceptos éticos en beneficio del bien común” y, de este modo, se destruye el mito de que “Chile es un país de empresarios y políticos virtuosos en relación a otros países”.

Como hoy “todo se sabe” por las redes sociales, se maneja información sobre las duras sanciones que, por ejemplo, se aplican e Estados Unidos cuando se atenta contra la libre competencia o se evade el pago de impuestos o cuando hay corrupción como el de la FIFA. Los entrevistados —casi el 59 por ciento—responden que en Chile no se aplican sanciones similares “porque los políticos defienden los intereses de las empresas”.

“Es probable que en su imaginario (de los entrevistados) esté la idea de que quienes cometen los llamados “delitos de cuello y corbata” son en algunos casos los mismos que transversalmente financian las campañas de muchos parlamentarios”, sostiene el estudio.

Penta – Soquimich

El estudio da cuenta que para los maulinos lo que más dañó la confianza de los chilenos es el caso Penta- Soquimich (71,5 por ciento) y muy de cerca consideran al caso Caval (64,3 por ciento) %). Les siguen la colusión de Papeleras, con 43,5 por ciento.

La iglesia católica tampoco queda ajena al cuestionamiento de la ciudadanía y alrededor del 69 por ciento de los encuestados sostiene que se deben investigar las denuncias de abuso de autoridad y sexual contra el sacerdote Rafael Villena.

Al mismo tiempo, no se detecta mucho entusiasmo respecto a las próximas elecciones presidenciales, puesto que no hay pronunciamientos claros sobre algún candidato en particular. Las preferencias las lidera Sebastián Piñera, con el 26,1 por ciento, seguido de Enríquez Ominami, con 15,7 por ciento. Pero 22,4 por ciento no se inclina por ningún presidenciable.

El director del CEOC, de la Facultad de Economía y Negocios, expresa que hay un descrédito generalizado en relación a los liderazgos tradicionales, lo que se traduce en algún grado de desafección de la política. “Pareciera que la ciudadanía no se siente representada por los grandes conglomerados, empezando a aparecer en las encuestas figuras nuevas como Giorgio Jackson o Gabriel Boric. Es probable que en el país se esté engendrando una situación parecida a la de España en que el movimiento de los “indignados” ha dado origen al partido político “Podemos” que se ve a futuro como una alternativa frente a los dos conglomerados históricos, el PP (Partido Popular) y el PSOE (Partido Socialista Español)”, concluye Medardo Aguirre.

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