La Autoridad Sanitaria supervisó estos lugares con la finalidad de prevenir enfermedades asociadas a la ingesta de alimentos y comprobar la implementación de las Buenas Prácticas.
Talca, poco a poco, se ha transformado en una ciudad universitaria. Cerca de 20 mil estudiantes cursan la enseñanza superior en alguna casa estudio de la capital regional. Tres mil 500 de ellos se alimentan a diario en sus casinos, por este motivo, la Seremi de Salud del Maule realizó una intensa fiscalización a estos lugares, con el objetivo de prevenir enfermedades asociadas a la ingesta de alimentos, así como, comprobar la implementación de las Buenas Prácticas de Manufactura y/o Implementación de Técnicas HACCP de Producción. “Debido al gran número de estudiantes que se alimentan en estos lugares, el control sanitario debe ser más estricto, ya que al existir alguna falta en este proceso de manufactura de alimentos, puede producir un brote de enfermedades masivo”, manifestó el Seremi de Salud, Hans Lungenstrass.
Tras el recorrido por todas las universidades de la capital maulina, se cursó dos sumarios sanitarios a distintos casinos, debido al incumplimiento de exigencias anteriores y/o deficiencias sanitarias. El primero de ellos correspondió a la Universidad Bolivariana y el segundo al Instituto INACAP.
En este último, la Autoridad Sanitaria detectó deficiencias en la manipulación de alimentos, los funcionarios no contaban con indumentaria correcta y la sala de elaboración se utiliza como bodega. Además, se prohibió elaborar platos preparados, ya que sólo tiene autorización como cafetería, excediendo el giro permitido. En tanto, la Universidad Bolivariana posee deficiencia en infraestructura y en la manipulación de alimentos y residuos. Mientras, que en Santo Tomás se levantó un acta con exigencias menores.
“La normativa del MINSAL exige a este tipo de recintos implementar un sistema denominado de Buenas Prácticas a la hora de manufacturar los alimentos… esto verifica el cumplimiento normativo de todos los insumos hasta el plato final”, reiteró el Jefe del Departamento de Acción Sanitaria de Talca, Ricardo Rodríguez.
En cuanto, a los casinos de la Universidad de Talca, Universidad Católica del Maule y la Universidad Autónoma de Chile, estos resultaron sin observaciones por parte de la Autoridad Sanitaria comprobando en terreno un funcionamiento acorde a las normas establecidas.
Por su parte, para el concesionario del casino de la UCM, Jaime Torres esta intensa fiscalización y exigencias sanitarias por parte de la autoridad, les permite mejorar su servicio para los estudiantes. “Esta inspección nos permite mejorar continuamente…dándole seguridad a nuestros clientes…y usuarios de que las cosas se están haciendo bien en el casino de la universidad”, manifestó.
Finalmente, los concesionarios de los casinos sancionados deberán “apelar” a la sanción ante la Autoridad Sanitaria. Tras ello, se dictará una resolución que puede ir en multa monetaria (UTM), prohibición de funcionamiento o bien se les otorga un tiempo para corregir las deficiencias detectadas.