Las heladas que afectaron esta semana a la localidad de Lipimávida, en la comuna de Vichuquén, generaron pérdidas parciales y totales en sus tradicionales cultivos de papayas.
Así lo informaron los productores locales, luego de que en días pasados la temperatura bajara hasta el punto de congelación a escasos metros de la línea costera, quemando las hojas e inutilizando los frutos en plena etapa de crecimiento.
Según los agricultores afectados por las heladas, las pérdidas varían entre un 25 por ciento y la totalidad de la producción de papayas que esperaban cosechar durante la presente temporada.
La parcelera Alfonsina Correa explicó que “el papayo se quema con las heladas, primero se les caen las hojas y después se les revienta el fruto”, provocándoles pérdidas económicas.
Doña Benilde Gamboa dijo que intentaron evitar el efecto de las heladas quemando neumáticos y aserrín, pero no lograron evitar daños que calcula en más de 3 millones de pesos.
Luis Beltrán, quien cultiva papayos hace más de 15 años afirmó que las heladas de esta semana dejaron las hojas negras y provocaron que los frutos reventaran.
“Uno pierde todas las esperanzas. Aquí estamos sonados. Quedamos casi con los brazos caídos”, manifestó Luis Beltrán.
La productora Miriam Bravo tiene hace 4 años un huerto de papayos en Lipimávida. A pesar de sus precauciones “tengo un 75% de daños en mi producción, tanto las matas y frutas”, indicó.
En tanto, José Díaz acusa pérdida total en sus plantaciones de papayos que tienen 8 años de antigüedad. Los últimos tres años asegura haber perdido, producto de las heladas, más de 5 millones de pesos.
El alcalde de la comuna de Vichuquén, Román Pavez López, manifestó su preocupación ante el grave daño económico que el frio provocó a un importante número de familias de su territorio.
“Hay pérdidas significativas entre los productores de papayas. Estoy entregando los antecedentes al gobierno para que destine recursos para replantar los árboles dañados y la gente pueda tener sus huertos en normal producción”, manifestó Román Pavez López.