Un grupo de 63 familias damnificadas por el tsunami enviaron un ultimátum al gobierno para que cumpla su compromiso y finalice la construcción de sus casas. De lo contrario, este viernes se tomarán las obras del conjunto habitacional Los Culenes de Lipimávida, en la comuna de Vichuquén, provincia de Curicó.
La desilusión, frustración y la impotencia reinan entre las familias de la localidad costera, luego que el 30 de mayo y sin dar explicaciones, la empresa a cargo de la construcción de sus casas definitivas abandonara las obras.
La dirigente social Elizabeth Rojas dice que “nos metieron el dedo en la boca porque nos ilusionaron con las casas. Nos hicieron tomar las medidas para comprar muebles. Siento rabia e impotencia. Estamos decididos a tomarnos las casas porque les dimos hartos plazos y no nos cumplieron”, manifestó.
Por su parte, Marcela Díaz dice que con este problema la vivienda que perdió en el maremoto la recuperará cinco años después. “Ver las casas que les falta tan poco para terminar nos desilusiona y desmoraliza. El sueño se nos escapa por las manos. Nos vamos a tomar las casas para que la reconstrucción sea realidad, como dijo el Presidente el 21 de mayo. Si quieren el voto, que nos ayuden”, ironizó.
Según explicó David Pérez, presidente del comité de vivienda que agrupa a los damnificados por el maremoto, a fines de 2011 Serviu obtuvo la factibilidad de agua potable de la cooperativa local para iniciar los trabajos en marzo del año 2012.
Cuando las obras llevaban un 75% de avance, la constructora decidió abandonar los trabajos, supuestamente porque la Dirección de Obras Hidráulicas habría aumentado las exigencias para dotar de agua potable al conjunto habitacional.
“Se dio factibilidad de agua para 63 viviendas. Ahora, la Dirección de Obras Hidráulicas en representación del gobierno, planteó que si no se hacía cambio de matriz no habría factibilidad y con suerte en dos años podrían solucionar el problema. Serviu no debería haber construido”, informó David Pérez.
El dirigente agregó que sus viviendas deberían haber sido entregadas en septiembre próximo, la empresa solicitó dos prórrogas de tres meses y abandonó las obras.
“El jueves vamos a plantear como directiva la toma y si la asamblea está de acuerdo, el viernes nos estamos tomando las casas”, afirmó el presidente del comité de vivienda de Lipimávida.
Este martes, el alcalde de Vichuquén, Román Pavez López, verificó en terreno que el viento y la lluvia está afectando a un número indeterminado de viviendas que quedaron a medio construir en el abandonado conjunto habitacional.
Reunido con la directiva de los damnificados en Lipimávida, el edil entregó su apoyo para exigir al gobierno que cumpla el itinerario de reconstrucción, que se inició al colocar la primera piedra el 13 de enero del año 2012.
“Yo no me explicó por qué la constructora abandonó Lipimávida. Las obras tienen que ejecutarse y terminarse porque detrás de esto hay muchas familias que sufrieron con el tsunami, con el terremoto”, planteó Román Pavez López.
El alcalde de Vichuquén aseguró que la responsabilidad es del gobierno que ha realizado ceremonias para iniciar las obras en cuatro conjuntos habitacionales en su comuna.
De éstos, las empresas han abandonado los trabajos en Lipimávida y Boyeruca. En el pueblo de Vichuquén se realizó la ceremonia el 11 de marzo y aún no inician trabajos. Solo en la localidad de Llico las obras están activas.
“En el pueblo de Vichuquén pusieron primera piedra porque venía el Presidente de la República. Se apuraron, ilusionaron a la gente y hoy día no hay ninguna construcción”, criticó Román Pavez López.
“La gente está aburrida de que el gobierno siga mintiendo. A la gente no hay que ilusionarla, hay que hablarle con la verdad. El gobierno, el ministerio de Vivienda tienen que responderle a los vecinos. Por eso estoy con ellos, voy a luchar con ellos y si hay que tomarse las viviendas, las vamos a tomar”, afirmó tajante el alcalde de la comuna de Vichuquén.
Este jueves por la tarde, los damnificados de Lipimávida esperan las explicaciones y posibles vías de solución por parte de la Egis de la Cámara Chilena de la Construcción. Si no hay solución, la directiva solicitará votar inmediatamente la toma indefinida del abandonado conjunto habitacional Los Culenes.