Héctor leal Santelices, Jefe de Carreras del Área Informática CFT San Agustín
Desde mi punto de vista de usuario, el primer acercamiento fue por medio del Atari 2600, una consola negra que se conectaba al televisor y que por medio de un cartridge, permitía cargar juegos que tenían texturas y pixeles irrisorios, pero en ese entonces tener una máquina que respondiera a los movimientos de una palanca de juego, era algo que podía superar la imaginación de cualquier niño, simplemente sublime.
Empezaba el año 89 y se pusieron de moda consolas como el Commodore 64 o el Atari 800XL, estos equipos tenían una mayor cantidad de recursos, y se cargaban programas y juegos con casettes, la calidad de las aplicaciones se superó tanto, que el esperar una hora para que se cargara el software valía plenamente la pena. Con el Atari 800XL y la programación en lenguaje Basic, tuve la oportunidad de participar en cursos en mi colegio, teniendo el acercamiento a la computación y programación.
No fue hasta el año 92 que pude ver y probar un computador “de verdad”, clónicos 286, con Windows 3.11 una maravilla de la tecnología que permitía interactuar con un mouse y un escritorio en una pantalla de 14”. El año 95 llegó y nuevos equipos y sistema operativo se estrenaron. Windows 95 fue la vedete de la computación.
Creo, y para muchos informáticos, que la era informática partió recién de este hito, ya que se hizo un poco más evidente el uso de internet, el escritorio de Windows permitió un mejor trabajo y de a poco empezó la masificación de los equipos, considerando que un equipo de características “rudimentarias”, para el día de hoy, podía superar fácilmente el millón de pesos de esa época.
Con la llegada de Internet el mundo cambió, las líneas telefónicas empezaron a colapsar, ya que por este medio se lograba la conexión a internet y al mundo. De cierta forma algunos nos volvimos más sonámbulos, porque el horario de bajo tráfico en la noche era considerablemente más barato que el de día.
La maravilla de la comunicación que conocemos hoy, empezó como un pequeño oleaje que poco a poco se convirtió en tsunami de información. Windows 98 apareció ese mismo año, con toda su fuerza, después siguió Windows Millenium. No había muchas diferencias entre los sistemas, que se diferenciaban por pequeños cambios en el escritorio.
Con la llegada del año 2000 se generó toda una expectativa de los usuarios en general, los computadores ya eran parte de la población masiva, pero nadie sabía si ocurriría un gran problema en los equipos con el cambio de milenio. Al final no pasó nada, los equipos siguieron avanzando, la velocidad de internet siguió creciendo, quizá marcó la época la aparición de “lo pirata”, todo era pirata, desde el software en un computador, hasta la música que se reproducía en los equipos de estéreo.
Ahí aparece Windows XP, el año 2001, ahora si con cambio de interfaz y una masificación total, cambios en los equipos, mejoras en la velocidad, en este periodo hacen su aparición los notebooks y equipos portátiles, pero existe una diferencia de precio gigante entre éstos y los equipos de escritorio, de a poco se irán masificando las laptops.
Windows lanza al mercado el Vista, el peor sistema operativo de todos los tiempos. Llega la conectividad móvil, aparecen los primeros Smartphone y algunas Tablet.
Por estos años Steve Jobs nos sorprende con sus lanzamientos de tecnología: primero el IPod, lo siguen el IPhone y posteriormente el IPad. Windows no se queda atrás y lanza al mercado el Windows 7.
Actualmente, en la casas hay, por lo menos un equipo (Notebook, PC, Smartphone o Tablet) y la conectividad está en todos lados, se vuelve ubicua y sinceramente soy un agradecido de haber vivido en estos cambios y de haber sido parte de la historia, sólo por estar en el momento exacto y de poder contribuir, hoy, a la educación por medio de la formación que me entregó la vida.