Una pelea al interior de un inmueble que ambos compartían en la comuna de San Rafael, Región del Maule, terminó con la muerte de José Jara Alcaíno de 62 años. Su cuerpo y según el testimonio del propio acusado Francisco Herrera Díaz, ya confeso del hecho, fue primero quemado para luego terminar los restos en una bolsa que el propio autor introdujo en el camión de basura, el que depositó todo lo recolectado, al interior del relleno sanitario El Retamo ubicado al norponiente de Talca.
A pesar de los esfuerzos por parte de la fiscalía y la PDI, el cuerpo no ha podido ser ubicado debido a las cerca de cinco toneladas que se encuentran sobre él, ya que de estos hechos que ocurrieron el 05 de marzo del 2012, se tuvo conocimiento casi una semana después.
Este lunes Herrera Díaz comenzó a enfrentar al tribunal oral en lo penal de la capital maulina, siendo acusado por la fiscalía por el delito de homicidio en calidad de autor y en grado de consumado.
“La tesis de la fiscalía es que efectivamente en este caso se dan todas las situaciones que la ley califica como un homicidio simple. Estamos pidiendo una pena de quince años de presidio mayor en su grado medio, sostenemos que el acusado efectivamente, tal como lo confesó, dio muerte a la víctima para luego deshacerse del cuerpo mediante de su incineración y posterior introducción en algún lugar del basural El Retamo que queda en el sector Huilliborgoa. Pese a que no existe en este caso un cadáver, ya que eso es efectivo, la posición de la fiscalía es que la inexistencia de un cadáver no puede ser obstáculo jamás para efecto de llevar a juicio de una persona que sostenemos es culpable de un delito de homicidio. La ley sanciona y castiga a quien que mata a otro, no a que no se encuentre el cadáver. Como para entenderlo de otra forma podríamos llegar al absurdo de que la ley premia en definitiva a aquel que ha sido astuto en ocultar el cuerpo del delito mediante cualquier forma, como por ejemplo arrojándolo al mar, incinerándolo, dinamitándolo para no dejar huella. Y no es eso lo que la ley quiere” afirma el fiscal Ángel Ávila a cargo de presentar todos los medios de prueba ante el tribunal.
Diversos peritajes químicos y fotográficos, entre otros, más el testimonio de cerca de 20 peritos y testigos son las pruebas claves que la fiscalía expondrá en este juicio que se estima finalizará esta semana.